Los grandes hombres son aquellos que luchan día a día por cumplir sus ideales con el fin de dejar en alto su imagen y construir un bien colectivo para quienes lo acompañan en el recorrido y para quienes de una u otra manera están implicados en la búsqueda de sus objetivos.
Para Jaime Esparza Rhénals, el éxito está en ir más allá de conseguir sus propios objetivos y se radica en la consecución de beneficios para todo el sector de las apuestas y los juegos de azar.
Este hombre que inició su carrera en los juegos de azar como vendedor de chance en el barrio Fontibón, con esfuerzo, dedicación y espíritu visionario ha logrado cumplir sus metas, paso a paso.
Primero consolidó su propia promotoría de apuestas y después de varios años de trabajar en pro del desarrollo de ésta logro construir la empresa de sus sueños y de su vida, compañía que le abrió las puertas en el mundo del chance y que fue el primer paso para comenzar a construir su carrera como empresario de éxito.
A partir de allí Esparza Rhénals, comenzó a trabajar no solo por el crecimiento de su empresa, sino también por el desarrollo del sector consiguiendo con esto el reconocimiento, el respeto y la admiración de quienes hacen parte del mismo, además de conseguir ser parte de diferentes proyectos y convertirse en un líder de las apuestas y los juegos de azar en el país.
Líder que a través de su ejemplo supo ganarse a las personas y que con empeño y dedicación logró ciertas concesiones que le permitieron crecer en el mundo de las apuestas y los juegos de azar como lo fue el conseguir su autonomía de operación al serle concedida la posibilidad de ser distribuidor autorizado del juego de apuestas permanentes en el año 1996.
Concesión que le dio el empuje comercial que necesitaba para fortalecerse como empresario de las apuestas en Colombia y le permitió lograr un espacio en varias regiones del país.
Participación que le ha permitido alzar su voz y participar de proyectos para dejar en alto la imagen de los juegos de azar en Colombia.